Antes perdía el tiempo en cualquier cosa, aquí aprendí a aprovechar el tiempo, también me ayudó mucho a mejorar mis notas y en mi vida espiritual.
Gracias a Laguna Grande, mi vida dio un giro de 180°, lo que más valoro son las charlas y la dirección espiritual que nos dan porque te ayudan a formar virtudes buenas para la vida, el trato con la familia y los amigos. Siempre digo a los chicos que Laguna Grande es un milagro que tienen que saber aprovechar al máximo.
Sin duda, Laguna Grande ha sido todo para mi, desde aquel primer día en que asistí como alumno del 8° grado. Había aprovechado al máximo las clases de refuerzo y de doctrina que brindaban los excelentes profesores y directores. Desde el año 2010, me desempeño como encargado de apoyo escolar del 5° grado. El centro me brindó una oportunidad única, pues de ese modo pude pagar mis estudios y ayudar a mi familia. En la actualidad estoy estudiando en la Universidad Nacional la carrera de Educación en Ciencias Básicas, gracias a Laguna Grande también descubrí mi vocación, la cual es enseñar y educar. Me han enseñado a dar dirección a mi vida, me educaron como jamás nadie lo hizo, Laguna Grande, mi gran Salvación.